A más de cuatro años de los acuerdos entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la paz sigue siendo un bien escaso y la violencia contra dirigentes sociales, defensores de los derechos humanos, campesinos, indígenas y afrocolombianos, enluta a cientos de familias en el país suramericano. Los datos registran sólo este año, 255 personas asesinadas en 66 masacres. Misma suerte corrieron 244 excombatientes desmovilizados en el marco de la reinserción establecida en el Acuerdo de Paz firmado el año 2016.
La Oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, denunció esta semana este crudo panorama e instó a las autoridades a tomar acciones concretas para proteger eficazmente a la población. Grupos criminales, opuestos a las políticas redistributivas, a la justicia transicional y a la reinserción de las y los excombatientes, obstaculizan los múltiples esfuerzos para la implementación de los acuerdos alcanzados en la mesa de negociación.
Son el Estado y las máximas autoridades que dirigen el país, los responsables de mantener la paz social y proteger a los grupos más vulnerables. En esta convicción, instamos al Presidente de Colombia, Ivan Duque, a velar por la justicia y ordenar el desmantelamiento de los grupos irregulares que accionan al margen de la ley, y sin castigo, contra víctimas indefensas, desarmadas, que fueron asesinadas brutalmente.
El Foro Permanente de Política Exterior se une al llamado de la Alta Comisionada que insta a las autoridades a desmantelar “las organizaciones criminales que hayan sido denominadas, como sucesoras del paramilitarismo y sus redes de apoyo” y a realizar investigaciones rápidas, imparciales y transparentes, que velen por el derecho de las víctimas a la justicia y la reparación.
Chile ha sido un país activamente comprometido con el proceso de paz en Colombia. Primero como acompañante de las tratativas que tuvieron lugar en La Habana, luego como integrante de la Misión de Verificación de la ONU. También promovió la formación de grupos de personalidades en apoyo al proceso de paz en varios países de América Latina.
Como FPPE exhortamos hoy a Chile a continuar este esfuerzo y a no permanecer indiferentes ante las denuncias efectuadas.