La primera ministra de Islandia Katrin Jakobsdottir, anunció esta semana en un comunicado que el país comenzará a permitir la entrada de turistas a partir del 15 de junio. Además, cada visitante recibirá una prueba Covid-19 gratuita a su llegada.
Los resultados de estos test se procesarán de forma inmediata y, aquellos que reciban un mensaje de texto que ratifique que su prueba ha dado negativo, podrán ingresar en territorio islandés, mientras que los turistas infectados deberán permanecer aislados durante 14 días y tendrán que abonar ellos mismos los costes de esta estancia.
A partir del 15 de mayo, «algunos profesionales que lleguen a Islandia, incluidos científicos, cineastas y atletas» podrán ser elegidos «para una cuarentena modificada», según declaró un funcionario islandés a Lonely Planet.
Asimismo, las autoridades del país podrán solicitar a los recién llegados que descarguen y se registren en su aplicación oficial de rastreo de contactos, que ya está siendo utilizada por casi el 40% de su población.
«Cuando los viajeros regresen a Islandia, queremos tener todos los mecanismos para salvaguardarlos y lograr el progreso en el control de la pandemia. La estrategia de Islandia de pruebas, rastreo y aislamiento a gran escala ha demostrado ser efectiva hasta ahora», señaló el ministro Turismo, Industria e Innovación, Thordis Kolbrun Reykfjord Gylfadottir.
«Si todo va bien, deberíamos ver a algunos turistas aquí este verano», aseguró el presidente de la Asociación de la Industria de Viajes de Islandia, Bjarnheiour Hallsdottir, según el Reykjavik Grapvine.
Islandia, con una población de unos 360.000 habitantes, ha registrado hasta este momento 1.802 casos de coronavirus y un total de 10 muertes por la pandemia.
Contenido publicado en: El Independiente