Comparte esta publicación

Ministro Muñoz: DD.HH. son “supraconstitucionales y ninguna norma puede afectarlos en su esencia

Citando una tragedia griega, dijo que existen normas no escritas que son ‘inmutables’.

El presidente de la Sala Constitucional de la Corte Suprema, Sergio Muñoz, fue el primer expositor de un ciclo de conferencias de la Universidad Central sobre el proceso constituyente.

El ministro, que es el primer integrante del máximo tribunal en exponer del tema tras la instalación de la Convención Constitucional, hizo un repaso histórico acerca de los reconocimientos y declaraciones de los derechos, el constitucionalismo, además de la profundización de los derechos y su protección, tanto en el nivel nacional como internacional.

Muñoz cree que hay que dar igual protección a todos los derechos y, por eso, la forma como se ha extendido la aplicación o el campo de aplicación del recurso de protección a los otros derechos que no están en el artículo 20 es por ‘medio de la igualdad ante la ley, del derecho a propiedad y comisión especial’.

Casi al final, Muñoz planteó una pregunta, que dijo no es fácil de resolver, acerca de lo que debe hacer un juez al zanjar un recurso de protección ante una antinomia o contradicción entre la ley y la Carta Fundamental: ‘¿Qué norma es la que debe tener presente el juez al resolver el recurso de protección? ¿Se obedece la Constitución o la ley?’.

Su respuesta fue clara: ‘Desde mi punto de vista, debe tener en cuenta la Constitución, pero todavía eso no se regula de esa manera. Por eso, no obstante sonar medio cómico, que al estar resolviendo un recurso constitucional debemos ir como parte ante el Tribunal Constitucional para que declare inconstitucional una norma que transgrede el orden constitucional, que el recurso de protección está cautelando’. Y agregó que no debiera haber una discusión de que cuando se está resolviendo un recurso de protección lo que se mire es la Constitución y no la ley.

Sobre los temas esenciales de derechos humanos, destacó los de primera generación, que están recogidos ‘como no afecte negativamente el Estado o a terceros. Es decir, reconózcame la libertad y no me restrinja mi libertad. Reconózcame el derecho a la vida, no me afecte el derecho a la vida, y así sucesivamente, para llegar a un Estado prestacional, servicial o Estado bienestar, obedeciendo al bien común y la función social. Estamos ante una exigencia que le hacemos al Estado para que nos entregue las facilidades para adquirir otros derechos: el derecho a la vivienda, a un bienestar mínimo dentro de la sociedad’. Dijo además que los DD.HH. son ‘supraconstitucionales y ninguna norma, incluida la Constitucional, puede afectarlos en su esencia’.

Al final recordó una obra clásica, la tragedia griega de Antígona, de Sófocles, en la cual en el palacio de Tebas, el rey Creonte dispuso que no se diera sepultura a un joven. Pero Antígona, su hermana, igual lo sepultó.

Antígona le dijo al rey Creonte ‘que no creía yo que tus decretos tuvieran tanta fuerza como para permitir que solo un hombre pueda saltar por encima de las leyes no escritas, inmutables, de los dioses: su vigencia no es de hoy ni de ayer, sino de siempre, y nadie sabe cuándo fue que aparecieron’. El rey ordenó que fuera abandonada viva en una sepultura de piedra, pero ella se suicidó. También lo hizo Hemón, su prometido e hijo del rey, y la esposa de Creonte.

A juicio del ministro Muñoz, con Antígona, se puede decir que ‘existen leyes no escritas, inmutables, su vigencia no es de hoy ni de ayer, sino de siempre’.-

«Existen leyes no escritas, inmutables, su vigencia no es de hoy ni de ayer, sino de siempre’. SERGIO MUÑOZ, MINISTRO DE LA CORTE SUPREMA

Autor: CINTHYA CARVAJAL

Contenido publicado en El Mercurio

Te puede interesar: